ARCHIVO - México 2006

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Comenzando el año 2006 tenemos ya muy claro el mapa político de los aspirantes a la presidencia y otros jugadores en el desarrollo de las campañas hasta el día de la elección.



La candidatura más definida era desde hace mucho tiempo la de Andrés Manuel López Obrador en el PRD. Aunque Cuahutemoc Cárdenas hizo lo posible por forzar una elección interna para participar y medir fuerzas, finalmente el peso de López Obrador fue definitivo y ni siquiera hubo un contrincante que se pronunciara en busca de la candidatura del partido.
En la parte final del año Andrés Manuel desapareció de los medios respecto a la etapa en que fue Jefe del Gobiero del D.F. y después con el episodio del desafuero. Dado que no está gastando en spots televisivos practicamente dejó de verse a excepción de las notas periodisticas que aparecieron en los noticieros.
Un movimiento que no creo que le reporte muchos votos de ganancia es la alianza que formó el PRD con el Partido del Trabajo y Convergencia. Se sabe que muy probablemente la votación de julio será definida por algunos pocos puntos porcentuales, razón por la cual se aliaron con los partidos que menciono. Pero el voto no es absoluto, quizá los votos que les pudieran aportar igualmente los puedan perder de otros electores que no vean bien ese tipo de alianzas.



El candidato del PRI es Roberto Madrazo, no hay gran sorpresa en su candidatura, pero sí ocurrieron muchos accidentes en el camino que seguramente les costará una perdida sustancial de votos.
La coalición de priistas contra madrazo, que se conoció como el "tucom", gastó miles de pesos en propaganda y un proceso de selección donde salió ganador el exgobernador del Estado de México Arturo Montiel. Seguramente no era el mejor, pero sí el que tenía más apoyos efectivos entre los mismos militantes y dirigentes. Pero una inteligente jugada lo expuso con una fortuna inexplicable, y antes de defenderse renunció a la candidatura: señal de presunta culpabilidad y de que prefierió al momento la impunidad a competir por la presidencia.
La ruptura además con Elba Esther Gordillo dejo ver que las practicas del PRI aún son de un grupo de mafiosos. Todo regido por la fuerza de los que tienen el poder en sus manos. No importa quién esté respaldando a Madrazo, cualquiera que sea la nomenklatura priista dejó muy en claro que no hay espacio para la competencia o para el diálogo.



La temprana e inexplicable retirada de Marta Sahagún en sus aspiraciones por ser presidenta a pesar del enorme apoyo según las encuestas, poco después nos enteramos que se debió a que su hijo está enredado en negocios de enriquecimiento inexplicable efectivamente con los favores del peso de la presidencia.
Eso dejó el campo libre para una elección que protagonizaron esencialmente Cálderon y Creel. Igualmente Santiago Creel simplemente desapareció de la contienda cuando comenzó a hacer eco el tema de los permisos que otorgó para casas de juego durante su estancia en la Secretaría de Gobernación.



A finales de noviembre del pasado año se publicaron con dos o tres días de diferencia las siguientes encuestas:

El Universal
AMLO 34
Calderon 22
Madrazo 18

Grupo Reforma
AMLO 29
Calderon 28
Madrazo 21

La encuesta de El Universal continuaba con las tendencias que predominaron durante todo el 2005, con López Obrador con muchos puntos de ventaja sobre todos los posibles contrincantes. Pero el grupo Reforma puso sólo un punto de diferencia entre Cálderon y AMLO, sin ningún evento importante que pudiera haber marcado un cambio en las tendecias. Si bien se definió la candidatura del PAN en la persona de Felipe Cálderon, el proceso fue gris y no aportó nada ni en el terreno de las ideas y ni siquiera en el de los escandalos.
Lo grave de estos resultados es que muestran una diferencia enorme en un mismo momento, hubo algo irregular en una de las dos encuestas que reflejo un diferencial importante, y si algo nos quedaba como punto de referencia eran precisamente las encuestas. Es bien sabido que es posible encausar las respuestas según se realizen las encuestas y si nos atenemos a aquel resabio "al cliente lo que pida", muy seguramente nos estaremos encontrando con encuestas de diferentes sabores y resultados.
Esto tiene un efecto en el electorado, hay una tendencia entre los indecisos a votar por el candidato que tenga la delantera, pero si se sigue proclamando "empate técnico" entre los 3 candidatos más importantes, muy seguramente tendremos una gran abstención el día de la elección.

Artículo publicado en el diario Cambio en su edición del 30 de marzo de 2006.